REPORTAJE
Más de 160 cámaras y unos treinta vigilantes velan por la seguridad en el Perpetuo y en el General Universitario
08.10.11 - 02:20 -
MARÍA DOLORES MUNERA albacete.lv@laverdad.es | ALBACETE.
DATOS SIGNIFICATIVOS
3.000
trabajadores desempeñan cada día su labor en el complejo hospitalario.
160
cámaras de vigilancia y más de una treintena de vigilantes controlan la seguridad del complejo.
80%
de los delitos de los últimos cinco años se han esclarecido, en colaboración con la Policía.
28
fueron los hurtos denunciados en el complejo hospitalario durante el pasado año 2010.
40
avisos han tenido que dar los vigilantes de seguridad en lo que va de año a la Policía Local, por vehículos mal estacionados en las instalaciones del complejo.
«Al mes se registran unas 28 incidencias por conducta antisocial, sobre todo en la zona de Urgencias»
El Complejo Hospitalario Universitario de Albacete (CHUA) puede presumir de ser uno de los pocos hospitales del país, pionero en Castilla-La Mancha, en contar con un departamento propio de Seguridad que vela cada día por las más de 15.000 personas que pasan por las instalaciones del Hospital General de Albacete, el del Perpetuo Socorro y la Unidad de Conductas Adictivas (UCA).
Un plan de Seguridad perfectamente estructurado «que cuenta con buenos equipos tanto personales como técnicos» como lo destaca el jefe de Seguridad del CHUA, Benito Mínguez, cuya labor se ha visto estos días reconocida por la Policía Nacional de Albacete.
«Es un complejo seguro», afirma sin dudarlo ni un segundo Benito Mínguez, quien insiste en que una de las claves de este éxito es «la profesionalidad del equipo», en estos momentos vigilantes de la empresa Securitas.
Reconoce que es «difícil» garantizar la seguridad en el sentido en que «hay que compaginar la accesibilidad total al complejo por parte de los pacientes, familiares, visitas, con la obligación de controlar desde el punto de vista de la seguridad todo lo que pasa cada día en estos hospitales».
Agradece la sensibilización de los trabajadores y las personas que acuden al complejo hospitalario con este tema y la «perfecta coordinación» que existe con los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado. Una gran colaboración con la Policía Nacional, por ejemplo, que ha posibilitado que en los últimos cinco años se hayan esclarecido más del 80% de las incidencias y los delitos que se han registrado en el complejo, en 2009 el 100%.
Y al hablar de las incidencias que se suelen registrar en el complejo hospitalario y que deben controlar los vigilantes de seguridad que aquí trabajan, Mínguez advierte que van más allá de los hurtos o las agresiones que, por fortuna, aunque muy mediáticas cuando suceden, se dan en muy pocos casos.
Así, advierte que en el año 2010 una de las incidencias que más intervenciones requirió por parte de los vigilantes fue la del 'control de fumadores'. Miles fueron las intervenciones a este respecto que se han reducido a menos de mil en este año, según detalla Mínguez, que explica que los vigilantes sobre este tema lo que hacen es «advertir a quienes puedan ver fumando en sitios como la puerta de Urgencias, que en el hospital no se puede fumar en todo el perímetro vallado, aunque una vez en la rampa de Urgencias el fumador pueda pensar que está en la calle».
Vehículos mal estacionados
Otra de las intervenciones que más 'trae de cabeza' a los vigilantes de seguridad está relacionada con problemas de estacionamiento de los vehículos. Muchos quieren dejar el coche en el parking del hospital aunque sea mal estacionado aludiendo a que son «unos pocos minutos» pero deben tener en cuenta que están en un centro hospitalario donde las entradas y salidas tienen que estar despejadas por las incidencias que pudieran surgir.
A este respecto, Benito Mínguez explica que en lo que va de año, los vigilantes de seguridad han tenido que llamar hasta en cuarenta ocasiones a la Policía Local por problemas con vehículos estacionados. No obstante, destaca que al menos la cifra se ha reducido desde 2010, cuando por estas fechas ya llevaban setenta avisos a la Policía Local por este mismo motivo.
Una veintena de hurtos
Respecto al tema de los hurtos, que es uno de los principales delitos en los que se suele pensar a la hora de hablar de la seguridad en un recinto, Benito Mínguez destaca que, de media, se registran en el complejo hospitalario una veintena de hurtos al año.
Detalla que el pasado año 2010, por ejemplo, fueron un total de 28 y subraya el alto porcentaje de esclarecimientos que llega a darse en este tipo de delitos gracias a la coordinación con los agentes de la Policía Nacional.
El jefe de Seguridad del CHUA advierte que prácticamente el 100% de los hurtos que se cometen en el complejo hospitalario se llevan a cabo aprovechando el descuido de la gente. Por eso, insiste en que «tenemos que mentalizar a la gente de que no tienen que obsesionarse con la seguridad, pero sí preocuparse». Reconoce que es «normal» que cuando alguien acude al médico esté más preocupado por su diagnóstico que por sus objetos personales pero apunta que al hospital «no viene solo gente que esté mala, sino que también pueden venir los malos», por lo que recomienda que se controlen los objetos personales, sin obsesionarse, eso sí.
Mínguez incide en que la mejor forma de evitar los hurtos es la «prevención» y apunta que también ahí tienen un importante papel de sensibilización los trabajadores del equipo de seguridad.
En relación con las agresiones, uno de los delitos más 'mediáticos que, afortunadamente, se repite «muy poco», según Mínguez, destaca que en lo que va de año 2011 «no ha habido ningún tipo de agresión» al personal sanitario del complejo hospitalario.
Sí reconoce que suelen registrar una media de unas veintiocho «incidencias antisociales» al mes. Incidentes en los que los pacientes, sin llegar a la agresión, sí pueden increpar a personal sanitario, por ejemplo, y que requiere la intervención de los vigilantes de seguridad para que la situación vuelva a la normalidad.
Benito Mínguez desvela que estas incidencias suelen registrarse principalmente en el área de Urgencias, donde los enfermos o familiares pueden estar más nerviosos mientras esperan la realización de una prueba o un diagnóstico, así como en la cuarta planta del Perpetuo Socorro, la unidad de agudos, donde están ingresadas personas que pueden padecer diversos tipos de enfermedad mental.
Un «excelente» equipo
El jefe de Seguridad del CHUA reconoce que los buenos resultados en esta materia son fruto del «excelente» equipo con que cuentan y de los medios técnicos, que se han ido mejorando con el paso de los años.
Recuerda que hace ahora siete años desde que se puso en marcha el equipo de seguridad como un área más del hospital y que «partiendo prácticamente de cero se han hecho muchas cosas, aunque queda todavía por hacer».
Mínguez explica que en el equipo de seguridad del CHUA cuentan con un coordinador de vigilantes y con cinco jefes de equipo, además de una treintena de vigilantes de seguridad.
Los jefes de equipo desarrollan una importante labor desde el Centro Operativo de Seguridad (COS), instalado en el Hospital General y desde donde se controlan las cámaras de seguridad del complejo hospitalario; el sistema de seguridad de incendios o cualquier alarma que pueda producirse, por ejemplo, si un ascensor se estropea. Desde aquí se controla el circuito cerrado de televisión, con las imágenes de las cámaras de seguridad, así como el control de accesos.
Instalaciones desde las que el equipo de seguridad del complejo, dirigido por Benito Mínguez, seguirá velando cada día por la seguridad de las miles de personas que pasan por estos hospitales.