Madrid Arena
Legalmente cumplen los requisitos para
el servicio
Vigilantes imputados en
el Madrid Arena continúan en la seguridad de Madridec
Fuente: elmundo.es - Esther Mucientes | Madrid
- 16/07/2013
Madrid Espacios y Congresos
(Madridec), la empresa pública que se encarga de gestionar las instalaciones
multiusos del Ayuntamiento de Madrid, ya tiene nueva empresa de seguridad:
Alerta y Control S. A. De esta manera, Seguriber, la empresa que se encargó de
la seguridad la trágica noche del Madrid Arena ya
no es la encargada de estas funciones, aunque sí continuarán trabajando, de
momento, algunos de los imputados en la causa abierta por la muerte de Katia, Rocío, Cristina, Belén y María Teresa.
Y es que, tal y como obliga
la ley, Alerta y Control ha subrogado a los empleados de Seguriber entre los
que se encuentran el coordinador jefe de Equipo Exterior de Seguriber, Raúl
Monteverde; José París Nalda, coordinador general de Seguridad
de la empresa de vigilantes; José Antonio Díaz Romero, jefe del
equipo de Seguriber; Roberto Mateos, vigilante, e Iván
Somontes Santamaría, inspector jefe de Seguriber. Todos ellos están
imputados por la tragedia del Madrid Arena en la que fallecieron cinco jóvenes.
Según han explicado a ELMUNDO.es fuentes del
Ayuntamiento, la ley obliga a las nuevas empresas a subrogar a los empleados de
la compañía que anteriormente se había hecho con el concurso, por lo que la ley
ampara que estos cinco empleados trabajen para la nueva empresa de seguridad.
Además, aseguran que el
derecho español es "garantista" y que como el caso se encuentra
todavía en fase de instrucción y que estos trabajadores como están imputados,
"pero no condenados",no se les puede despedir "así como
así", porque "sería ir en contra del Estatuto de los
Trabajadores".
Otra cosa es que la nueva
empresa, Alerta y Control, decida por su cuenta no contar con los servicios de
estos cinco vigilantes. De hecho, el juez Eduardo López Palop, instructor del
caso, no ha tomado ninguna medida cautelar contra ninguno de ellos.
Ni están suspendidos ni
tampoco se les ha retirado la Tarjeta de Identidad Profesional (TIP),
certificada por la Policía Nacional, y que es obligatoria para ejercer como
vigilante y como inspector, por lo que los cinco cumplen legalmente los
requisitos para ejercer su trabajo como vigilantes y responsables de
seguridad.
Además, desde el
Ayuntamiento afirman que tampoco las bases del concurso pueden exigir que una
empresa tenga o no tenga imputados porque, recuerdan, "la
imputación no supone una sentencia en firme". Y, por último, añaden
que es la Policía Nacional la encargada de controlar las labores de seguridad
de estas empresas ya que, como recoge el Plan de Seguridad, la empresa de
seguridad tiene que enviar con 72 horas de antelación a la Policía Nacional sus
planes de actuación que los deben de aprobar.
Encargada de la seguridad exterior
Seguriber es la empresa que
se encargó, según declaró ante el juez su propietario, Carlos Manzanares, y el
director de Seguridad de Madrid Espacios y Congresos, Rafael Pastor, de la
seguridad exterior durante la fiesta de Halloween del Madrid Arena.
La realidad es que
Seguriber tenía apenas seis vigilantes dentro de Madrid Arena, o más bien en su
perímetro: uno en cada puerta de emergencia del edificio, más otro en la sala
de cámaras. La función de todos ellos, alega la empresa: simplemente
controlar el uso de esos accesos. Y eso es lo que se ve en las imágenes: a
los miembros de Seguriber en las puertas, no en el interior, según informan
Quico Alsedo y Pablo Herráiz.
Los cinco trabajadores de
Seguriber, ahora de Alerta y Control, imputados en el Madrid Arena se encargaron
de vigilar y coordinar el perímetro exterior durante la fiesta. Raúl
Monterde, jefe de Equipo de Seguriber, trabajó aquella noche como coordinador.
Ante el juez negó que él fuera el que abrió el portón de acceso directo a la
pista por el que se colaron en masa 2.500 personas. La orden
la dio Francisco del Amo, coordinador de Operaciones y Proyectos de
Madridec, que a su vez la recibió del promotor de la fiesta Miguel Ángel
Flores.
José París Nalda, coordinador de Seguriber, declaró ante el juez, por
su parte, que aquella trágica noche había menos vigilantes de los que tendría
que haber habido para "ahorrar costes" como les
pidió Madridec.
Por su parte, Roberto Mateos, era el
vigilante encargado de las cámaras de vigilancia durante la fiesta. Por último, Iván
Somontes, que se encontraba en Cantabria la noche de la fiesta, declaró que
las cámaras no vieron ni avalanchas ni petardos ni bengalas y que por eso no se
avisó a las Fuerzas de Seguridad. Declaró que al no ver nada por las cámaras ni
ser avisados por la seguridad interior, K34, según se evidencia en las
imágenes, a las que ha tenido acceso a ELMUNDO.es, no llamaron a la Policía.