viernes, 9 de agosto de 2013

Seguridad Aeropuertos: Un experimento cuestiona la seguridad en los vuelos

450 GRAMOS DE EXPLOSIVO
Una periodista burla el control de un aeropuerto pasando con explosivos

Fuente: intereconomía.com – 8 Agosto 2013 - ITXU DÍAZ

El experimento de ‘Le Soir Magazine’ junto a una empresa de simulación de armas y explosivos evidencia graves fallos de seguridad.

450 gramos de explosivos y una navaja de la marca francesa Opinel. Ese era el equipaje que portaba un día de finales de julio la periodista del semanario belga Le Soir Magazine al cruzar los controles de seguridad de un aeropuerto europeo. Unos controles que atravesó sin problema alguno.

El experimento, realizado en colaboración con la empresa Tactical5, dedicada a la simulación de equipajes explosivos, ha desatado la alarma en toda Europa y ha puesto de nuevo en tela de juicio la seguridad en los vuelos. No fue una iniciativa en solitario de Le Soir Magazine, sino que la periodista se sumó a los controles rutinarios que este tipo de empresas llevan a cabo en diferentes aeropuertos.

En esta ocasión, la reportera viajaba acompañada de otros cuatros pasajeros ficticios que también intentaron entrar al avión con material peligroso: varios cuchillos, un machete, una granada, y un arma desmontada, todo ello oculto en el equipaje excepto uno de los cuchillos, que un hombre portaba en su calcetín. Les acompañaba el director de la agencia Tactical5, Bretholz Simon. Tan sólo el jefe de seguridad del aeropuerto estaba al tanto del experimento. El resultado, estremecedor: sólo se detectaron cinco de los ocho objetos ocultos. En cuanto a la bolsa que contenía los explosivos, pasó el control sin que nadie la examinase. Según Simon, el aeropuerto salió mejor parado que en otras ocasiones, ya que este tipo de exámenes se producen varias veces al mes, y la tasa media de detección de objetos ilegales ronda el 40%.

La periodista de Le Soir Magazine preparó a conciencia su trabajo. La empresa de seguridad le proporcionó los 450 gramos de una “réplica perfecta” de explosivos que introdujo en su equipaje de mano. Es decir, era una bomba, pero una bomba diseñada de forma que nunca podría explotar.

Además, por si fuera poco, llevaba también la citada navaja camuflada en su sujetador. Ninguno de los controles, ni el arco de seguridad ni el escáner, detectaron irregularidad alguna, o al menos, nadie le impidió el paso hacia el avión, regalándole un sensacional reportaje para su semanario, y al tiempo, poniendo en evidencia la seguridad del aeropuerto.

Aunque en un primer momento, desde Le Soir Magazine afirmaron que no revelarían el nombre del aeropuerto por motivos de seguridad –sólo matizaron que se trataba de un lugar “muy conocido y frecuentado” en verano–, todo apunta a que se trata del de Charleoroi, 46 kilómetros al sur del centro de Bruselas.

La propia periodista implicada así lo ha dejado entrever después de que David Gering, director comercial de este aeropuerto, se apresurase a negar los rumores que señalaban que las pruebas se habrían producido en esta terminal. No en vano, reconoció que “el aeropuerto de Charleroi, como el de Zeventem, y otros” contrata a empresas externas para supervisar el trabajo de los vigilantes de seguridad. Gering subrayó que la seguridad del aeropuerto es grande aunque “el riesgo cero” no existe. 

No opinan lo mismo desde la empresa Tactical5, que después de esta prueba en Bélgica ha lanzado una estadística no menos alarmante: “el 60 por ciento de los objetivos ilícitos no son detectados en los aeropuertos”. Aunque coinciden con Gering en que no se puede reducir a cero el riesgo, insisten en la necesidad de mejorar los controles.

Tras la polvareda mediática levantada en Bélgica con el experimento periodístico, algunos expertos desacreditan su validez, afirmando que el hecho de que un detector de explosivos “no detecte explosivos falsos es normal”. Menos justificación han encontrado para la navaja oculta en la ropa de la periodista, y las armas que lograron colar los otros pasajeros. Por otra parte, el debate ético y periodístico se ha trasladado a las redes sociales, donde un grupo de ciudadanos solicitan a las autoridades que sancionen a la periodista por “tentativa de atentado terrorista”.

No obstante, en la web de Tactical5 se ofrece toda la información técnica sobre cómo realizan sus explosivos simulados –y su eficacia–, que son empleados habitualmente para pruebas de formación de policías, y para experimentos de seguridad en aeropuertos.