Euskadi
"En cuatro meses hemos
cobrado solo 600 euros, no podemos seguir así"
Los
más de 200 vigilantes de seguridad de Euskotren y de las obras del TAV apremian
a la Administración Concursal para que agilice los pagos de las tres nóminas
que les deben desde octubre dada la precaria situación de algunos de los
trabajadores.
Tras
la anulación del juez del embargo de las cuentas de la empresa para la que
trabajan, Bizala, actualmente en concurso de acreedores, los afectados aseguran
que siguen sin cobrar.
La
esperanza de los trabajadores es una subrrogación que les permita conservar sus
puestos o "que cierren y nos manden al paro, porque esta indefinición nos
va a matar".
Fuente: eldiario.es - Natalia González de Uriarte -
08/01/2015
Algunos de los vigilantes de Bizala, la
empresa de seguridad que custodia las estaciones de Euskotren y algún tramo de
las obras del tren de Alta Velocidad, TAV, no pueden soportar más la situación
que arrastran desde octubre. Hace cuatro meses que 225 empleados no cobran sus
salarios. Según aseguran solo han recibido en este tiempo 600 euros.
"Sacar adelante una familia, con hijos e hipoteca, en una casa en la que
solo entra ese dinero durante cuatro meses, es misión imposible",
denuncian.
La empresa para la que trabajan entró en
concurso de acreedores a primeros de noviembre. Al mismo tiempo las cuentas de
la compañía fueron embargadas por los consecutivos impagos con Hacienda. Las
obligaciones pendientes con la Administración siempre son las primeras que deben
abordarse en estos procesos concursales así el pago de las nóminas de los
empleados pasó a un segundo plano.
Concentración
celebrada por los trabajadores frente a las oficinas de la empresa Bizala en
Bilbao (foto cedida por CCOO).
Cuando la precariedad económica
asfixiaba a las familias afectadas por el adeudo de las nóminas entra en escena
el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Bilbao. El juez, a 31 de diciembre, da
orden de levantamiento del embargo de la Hacienda Foral de Bizkaia que pesaba
sobre la empresa, así como del dinero de la facturación postconcursal
consignado por los clientes en el juzgado. La medida es oxígeno para los
trabajadores. "El administrador concursal que lleva el caso de Bizala nos
comunica al comité de empresa que se va hacer frente al pago de la parte que
falta de Octubre y la nómina de Noviembre. Nos deben mucho más pero algo es
algo", declara Eloy Villanueva, delegado de CCOO y representante del
Comité de Empresa. Los empleados de Bizala revisan cada día nada más ponerse en
pie desde el uno de enero las cuentas en las que tienen domiciliada la nómina,
pero aseguran que siguen sin cobrar.
Comparecencia en el Parlamento vasco, pospuesta
Les deben 2.800 euros y parte de las 270
horas extras que llevan acumuladas en 2014. Pese a ello, todos acuden
religiosamente a su puesto de trabajo, todos, menos los que están de baja.
"Algunos han caído en depresión por la situación que padecen y están medicados.
Así no pueden velan por la seguridad de las instalaciones", explican desde
CCOO. Muchos han recurrido a los servicios de Cáritas para paliar la
precariedad que les atenaza. No cobran pero tampoco aspiran a ayudas sociales
porque esa indefinición laboral en la que están sumidos no les reconoce como
perceptores. "Confiamos en que se dé una subrogación y mantener así
nuestros puestos. O que cierren y nos manden al paro porque esta indefinición
nos va a matar. En cuatro meses hemos cobrado solo 600 euros, no podemos seguir
así", confiesan desde el Comité de Empresa.
Además de las movilizaciones los
trabajadores afectados tienen previsto acudir al Parlamento vasco para explicar
su situación y reclamar la intermediación de los grupos políticos. "Íbamos
a comparecer a petición de EH Bildu en una sesión de urgencia pero el PP y el
PNV lo han frenado. Tienen que escucharnos y forzar para que el Gobierno vasco
nos ayude. Algo tendrá que decir el Ejecutivo cuando la mayoría de los
servicios de la empresa son para la Administración pública", declara
Villanueva.