La policía busca al agresor que intentó violar a una vigilante de seguridad
en Sestao
La resistencia que ofreció
la víctima evitó que el agresor consumara la violación
Fuente: elcorreo.com 29.12.12 - 02:07 - IVÁN ALONSO | SESTAO.
Una vez más, uno de los
numerosos puntos negros para la seguridad de las mujeres que existen en zonas
despobladas de la Margen Izquierda se convirtió ayer de madrugada en escenario
de un nuevo intento de agresión sexual. Una mujer, vigilante de seguridad en el
centro comercial Carrefour de Sestao que acudía andando a su puesto desde
Barakaldo, fue retenida, arrastrada y golpeada reiteradamente en la cara por un
individuo que también intentó forzarla. Sólo la resistencia que ofreció la
víctima evitó que el agresor consumara la violación. La Ertzaintza mantiene
abierta una investigación para detener al sospechoso.
La agresión tuvo lugar a
las seis y media de la mañana. La mujer cumplía con su rutina diaria de ir
andando a su puesto de trabajo. Y, según fuentes policiales, todavía estaba en
Barakaldo -a la altura del hospital de San Eloy-, cuando se percató de que un
hombre, que «podría ser de origen sudamericano», la seguía. Pese a ello, no
cambió su ruta y siguió por la calle La Bondad hacia la rotonda de Sestao, una
zona de pabellones, centros comerciales y una gasolinera cerrada ayer por la
huelga.
Fue al alcanzar la calle
Gabriel Celaya de Sestao donde, aprovechando los descampados que atraviesan el
arroyo Castaños, el hombre se le acercó por detrás y, según las mismas fuentes,
la agarró del pelo y la tiró al suelo con la intención de violarla. Sin
embargo, gracias a su preparación física, la chica «se resistió con fuerza» y,
al parecer, el agresor no pudo consumar el acto. Furioso, la arrastró cerca de
la pasarela metálica que conduce a Carrefour hacia una zona pantanosa. Allí la
propinó una paliza y numerosos puñetazos en la cara. Poco después, y lleno de
barro, según el testimonio de la víctima, el hombre huyó, perdiéndose su pista
por Aparcabisa.
Rostro cubierto de sangre
La mujer pudo salir
entonces de la vaguada con el rostro cubierto de sangre, la ropa sucia y
deshecha, y pedir ayuda a un transeúnte, que llamó sobre las siete de la mañana
al 112. Cuando los agentes se personaron en el lugar y comprobaron la seriedad
de las heridas que la víctima presentaba en la cara llamaron a una UVI móvil,
que la trasladó al hospital de Cruces, donde permaneció toda la mañana en
Urgencias antes de ser dada de alta. Posteriormente, la Ertzaintza realizó una
inspección ocular del lugar en el que se cometió el ataque en busca de pruebas
para intentar localizar al autor de los hechos.
La junta de portavoces del
Ayuntamiento de Sestao, que expresó su «profunda repulsa» ante esta «brutal
agresión», convocó anoche a la ciudadanía a una concentración bajo el lema
'Violencia de género, ¿qué sentido tiene?'. Decenas de personas arroparon a la
Corporación.