En
Enero de 2012 podíamos leer en prensa, murciaeconomia.com, que la empresa Magasegur
había cerrado el ejercicio de 2011
con un volumen de negocio de siete millones de euros, una cantidad que duplicaba
la facturación de 2010 y que su previsión para el año 2012 era alcanzar los
9M€. Además fué distinguida por la dirección general de Policía a raiz de sus actuación tras el terremoto de mayo de 2011 en
Lorca.
Desde hace unos días, pasará a ser
conocida como una de las empresas de seguridad que primero ha procedido a la
firma de un convenio colectivo de empresa, al amparo de la Reforma Laboral
llevada a cabo por el Gobierno de turno.
Un Convenio Colectivo que ha sido
firmado por representantes de los Sindicatos UGT, USO ( la mayoría ) y CSIF, y
rechazado por la representación de CCOO.
Este Convenio se retrotrae a los
niveles salariales del Convenio Estatal de 2011, en cuanto a la tabla salarial
para el 2012 del Vigilante de Seguridad y reduce incluso estos en la tabla
salarial para el 2013, situando el salario base en 801,41 €, y todo a pesar del
incremento en su volumen de negocio y su política de expansión que obviamente
va a llevar a cabo con el sacrificio salarial de todos sus trabajadores y con
el beneplácito de los que dicen ser sus representantes.
A posteriori de la firma de este Convenio
los Sindicatos UGT, CSIF y USO parece que han desautorizado la firma de sus
representantes en la Mesa Negociadora y han iniciado los trámites para la
impugnación del mismo.
Con independencia del resultado de
estas impugnaciones, a fecha de hoy todavía no se sabe nada de la relativa al
Convenio de SEGURIBER, hay que señalar, una vez más, lo manifestado desde este
blog en numerosas ocasiones, con relación a la adulteración de la
representación sindical en este Sector, en el que con relativa frecuencia los
representantes elegidos en las empresas valen para el cómputo, pero a la hora
de la verdad muchos de ellos traicionan los principios y las directrices de sus
propias organizaciones para dar gusto a sus jefes.
Hace poco tiempo el cómputo
valía para obtener la representación a los efectos de la negociación del
convenio estatal donde las organizaciones intentaban plasmar sus propuestas, no
siempre del gusto de los trabajadores del sector, y ejercían un control férreo
sobre los intervinientes en la negociación del Convenio.
Hoy ,con la reforma de
la negociación colectiva efectuada por el Gobierno, y la preferencia de los Convenios
de Empresa sobre los de ámbito sectorial, el escenario donde se discuten el
salario y las condiciones de trabajo de los vigilantes es otro, y no cabe duda
que peor, con los ejemplos de Magasegur y Seguriber. Es hora de que algunos sindicatos elijan bien a
sus candidatos, ya no valen los delegados para el cómputo, se necesitan
representantes con principios para defender los derechos de los trabajadores
del sector de seguridad.
Gracias al compañero de CCOO por
mantenerse firme en los principios de defensa del Convenio Sectorial.