viernes, 3 de julio de 2015

Condenado por amenazar a la seguridad del Hospital Torrecárdenas y agredir a un policía en Comisaría

La sentencia considera a A.F.G. autor de dos faltas de amenazas por los que le impone sendas multas de 20 días a razón de tres euros al día, y de un delito de atentado ya que "acometió al agente"

 EUROPA PRESS 2 julio 2015
El Juzgado de lo Penal 1 de Almería ha condenado a cuatro meses y 15 días de prisión a un vecino de Almería que amenazó a dos guardias de seguridad del complejo hospitalario de Torrecárdenas de la capital al que había acudido para ser atendido al percatarse de que ellos habían dado aviso a la Policía Nacional debido al comportamiento que estaba teniendo su esposa en el Área de Urgencias.

Dos días después, insultó y lanzó un puñetazo a un agente de Policía Nacional en las dependencias de la Comisaría, a las que acudió, en estado de embriaguez, porque habían detenido a su mujer y se encontraba en los calabozos. Entró, "desafiante y con violencia", al grito de: "cobarde, maricón, cabrón inútil, que me detengas" y, a continuación, lanzó un puñetazo que esquivó el funcionario.

La sentencia, consultada por Europa Press, considera a A.F.G., de 48 años, autor de dos faltas de amenazas por los que le impone sendas multas de 20 días a razón de tres euros al día, y de un delito de atentado ya que "acometió al agente para así lanzarle un puñetazo cuando este intentaba calmarlo", por el que le condena a cuatro meses y 15 días de prisión. Le aplica, en este caso, la eximente incompleta de embriaguez y la agravante de reincidencia ya que tiene antecedentes por hechos similares.

Según recogen los hechos probados, el acusado se encontraba a las 15,30 horas del 19 de mayo de 2015 en Torrecárdenas para ser atendido médicamente y, cuando se percató de que los vigilantes de seguridad daban aviso por la conducta que mantenía su esposa en el centro, se acercó a una de ellas y le dijo "con ánimo de atemorizarla": "Como mi mujer no duerma en casa esta noche, yo no amenazo como ella, yo actúo".

Para "dar más veracidad" a la amenaza, según remarca el magistrado Luis Columna, le recordó que hacía un año había sido víctima de una agresión en su puesto de trabajo y le dijo: "tú eres la que te pegaron una paliza y te conocemos todos". La misma amenaza se la repitió a su compañero.

A.F.G. se personó dos días después, de madrugada, en la Comisaría Provincial, donde su esposa estaba detenida, y consumó el atentado contra el agente aunque lo hizo tras una "ingesta de alcohol que limitaba de forma considerable su capacidad de discernimiento aunque no llegaba anularla".


El magistrado califica las amenazas como falta ya que, pese a que reconoce la gravedad por el recinto hospitalario en el que se realizaron, "son de poca intensidad". El fiscal solicitó tres años de cárcel por el atentado y dos años de prisión por cada amenaza, que calificó de delitos.