Detenido
por agredir de madrugada a una vigilante de la estación de autobuses de Oviedo
La víctima lamenta la
"inseguridad" de los trabajadores del sector en servicios
conflictivos: "Nos vemos solos, vendidos"
Fuente:
ine.es - 11.07.2016 Oviedo, M. PALICIO
Un
hombre fue detenido en la madrugada de ayer como presunto autor de una brutal
agresión a una vigilante de seguridad de la estación de autobuses de Oviedo. El
joven la emprendió a puñetazos y patadas después de que la agente le llamase la
atención por traspasar las cintas que delimitaban una zona acotada en las
dársenas de la terminal. Tras ser amonestado por otros pasajeros, el agresor
echó a correr llevándose el teléfono móvil de la víctima, pero poco después fue
localizado por una dotación de la Policía Nacional en la calle Fray Ceferino.
Acusado de robo con violencia, hoy pasará a disposición judicial y será
encausado esta mañana en un juicio rápido.
Eran
las cinco y veinte minutos de la madrugada. La vigilante, María Antonia
Celadilla, de 51 años, apercibió al acusado al observar que cruzaba por debajo
las cintas con las que se separa la zona de la que salen los "búhos"
del resto de los andenes. Según el relato de la agredida, "le pregunté
adónde iba y me dijo que a Gijón. Le indiqué la dársena de la que salía el
autobús, la cuatro, y la hora de salida y se fue, pero al poco tiempo volvió a
intentar cruzar las cintas". Al llamarle de nuevo la atención, el joven la
insultó y la amenazó, a ella y a un compañero del servicio de limpieza que se
encontraba a su lado, con "darnos dos puñaladas por la espalda".
Cuando
poco después ella salió a los andenes a retirar la cinta, "porque llegaba
un autobús cargado de pasajeros de Madrid", el agresor se le acercó, le
puso la mano el hombro y al quitársela la emprendió a puñetazos en la cabeza y
la cara, la tiró al suelo y allí siguió propinándole puntapiés hasta que la llegada
y las recriminaciones de algunos viajeros que habían sido testigos del ataque
puso en fuga al asaltante. Una vez denunciado lo ocurrido a la Policía, los
agentes encontraron y arrestaron al hombre y lo trasladaron a Comisaría.
Fuertemente
magullada en la cara y un ojo, dando gracias por la presencia de los testigos
que acorralaron a su agresor, la vigilante lamentaba ayer la vulnerabilidad en
la que se encuentra en ocasiones el personal de seguridad privada en
determinados lugares y horas particularmente conflictivos como la madrugada en
una terminal de autobuses. La soledad del servicio en esas circunstancias, sin
compañía, le hace lamentar que a veces "nos vemos solos, vendidos, en una
situación de inseguridad muy grande, porque hay mucho loco suelto".
Se lo
dice la experiencia de "trece años trabajando en estaciones de
autobuses" y unos cuantos juicios por altercados a sus espaldas, todavía
con el susto en el cuerpo y la certeza de que a esas horas de la madrugada
"si no llega a ser por la gente que había alrededor me mata".
CCOO
condena la agresión a una vigilante de seguridad en la estación de autobuses de
Oviedo
CCOO ha condenado este lunes
la agresión el pasado sábado a una vigilante de seguridad en la estación de
autobuses de Oviedo. CCOO de Construcción y Servicios de Asturias ha advertido
de la situación de inseguridad que vive el colectivo de los trabajadores de la
seguridad privada a la hora de realizar su servicio en entornos y situaciones que
favorecen la conflictividad.
Fuente:
20minutos.es - EUROPA PRESS. 11.07.2016
Desde
el sindicato exigen que se adopten las medidas necesarias y urgentes para que
este tipo de sucesos no vuelvan a producirse. "No puede seguir
permitiéndose bajo ningún concepto que se estén realizando servicios bajo
mínimos recursos humanos y dotación.
Esta
constante, está generando un estado de permanente vulnerabilidad donde
solamente hay un vigilante como es el caso de la estación de autobuses,
situación que no garantiza las condiciones de seguridad del recinto en el que
desarrolla su trabajo e incluso como en este caso produciéndose hechos que
atentan contra su propia integridad física", señalan desde CCOO.
Y añaden que la vigilancia de la seguridad de
la estación de autobuses de Oviedo se podría calificar como un servicio de
relativa conflictividad, ya que sobre todo en temporadas de verano con el
aumento de viajeros multiplica actividad.
Tras un
juicio rápido celebrado este lunes el agresor ha sido condenado al pago de una
multa de 4 euros al día durante un mes, lo que equivale a la cantidad de 120
euros.