Los
últimos escoltas del PP vasco se reconvertirán en vigilantes de seguridad
- La principal adjudicataria de Interior pretendía dejar en la calle a los 109 empleados que aún quedan en su plantilla, pero el sindicato CCOO ha logrado parar los despidos.
- En su lugar se implementará un plan de “reciclaje” que garantizará los puestos de trabajo.
- Muchos de los guardaespaldas pasarán al sector de Prisiones.
Fuente:
publico.es - DANILO ALBIN – 02/12/2016
BILBAO.-
Los 109 escoltas que aún quedan en Euskadi ya pueden dormir tranquilos. Luego
de 26 días de negociaciones, el sindicato CCOO ha conseguido que la empresa
Ombuds Seguridad (adjudicataria de la mayoría de los contratos del ministerio
del Interior para la protección de políticos y empresarios amenazados por ETA)
abandone su plan de despidos colectivos. En lugar de perder su trabajo, los
empleados formarán parte de un “proceso de reconversión del sector”, mediante
el cual se reciclarán como vigilantes de seguridad.
“Estoy
pletórico, y los trabajadores también”. Así se expresaba el responsable de
Seguridad Privada de CCOO Euskadi, Arturo Salinas, quien ha estado al frente de
las conversaciones junto a los sindicatos UGT y FASE. “Estábamos en el periodo
de consultas de un mes que marca la ley para estos casos, y solamente nos
quedaban cuatro días para tratar de llegar a un acuerdo. Ya no había mucho
margen de maniobra, pero finalmente hemos logrado nuestro objetivo: no se
despedirá a ningún escolta”, remarcó.
Paradójicamente,
este conflicto laboral forma parte del nuevo escenario político que se vive en
Euskadi. Cinco años después del cese definitivo de la violencia decretado por
ETA, todo indica que la figura del escolta pasará a formar parte del pasado. De
hecho, Ombuds Seguridad pretendía deshacerse de sus últimos 109 empleados (en
2011 eran cerca de 3.000) bajo el argumento de que el Ministerio de Interior
retirará prácticamente todos los servicios de protección personal a lo largo
del próximo año.
Según
explicó Salinas, cerca del 90% de los escoltas que aún está en activo presta
funciones para cargos públicos del PP, mientras que el restante 10% tiene
asignadas tareas de protección de empresarios vascos que en algún momento
fueron amenazados por ETA. “Estimamos que la retirada del servicio será
paulatina, de manera que a finales de 2017 sólo habrá escoltas para cinco o
seis políticos muy importantes” del PP vasco, señaló el sindicalista.
A las
cárceles
Cerrado
el capítulo del ERE de extinción, ahora se abre la fase de negociaciones sobre
la reconversión del sector. A partir del día 13, los representantes de la
plantilla y los empresarios buscarán los mecanismos apropiados para que los 109
empleados pasen a cumplir tareas de vigilantes de seguridad, para lo que
recibirán la formación necesaria.
Además,
se deberá garantizar que el cambio de puesto de trabajo no acarreará ningún
tipo de caída salarial. “Ombuds Seguridad tiene a día de hoy el servicio de
vigilancia de muchas cárceles, por lo que seguramente muchos escoltas pasarán a
esa área”, adelantó Salinas. De esa manera, la época de políticos con
guardaespaldas quedará definitivamente cerrada.