Movilizaciones
en la vigilancia privada del Aeropuerto ante la escasez de personal y
"vulneración" de derechos laborales
- La plantilla está convocada a una concentración el 9 de febrero en la puerta del aeródromo.
Fuente:
elindependientedegranada.es - 26 de Enero de 2018
El
personal de vigilancia privada del Aeropuerto de Granada ha convocado
movilizaciones en protesta por la escasez de efectivos y la "constante
vulneración de derechos laborales", que se traduce en jornadas y turnos
que exceden el máximo permitido, sin respetar el periodo de descanso
reglamentario; modificación de las condiciones de trabajo de manera
"arbitraria", imposibilidad de conciliar la vida familiar y laboral,
y toda una serie de "abusos" que han llevado la plantilla "al
límite" en un servicio sensible, como es la vigilancia aeroportuaria, que
incluye tanto la seguridad de las instalaciones como la del tráfico y control
de pasajeros, según explica la delegada sindical Mari Carmen López, de CCOO.
La
plantilla, formada por 24 personas, está convocada a una concentración el
próximo día 9 de febrero a las puertas del aeródromo granadino, como primera
medida de protesta, y el personal no descarta llevar el caso al juzgado de lo
Social, tras haber denunciado reiteradas veces la situación a la Inspección de
Trabajo, que les ha dado la razón y ha corroborado los incumplimientos, con el
levantamiento de actas de infracción pero, pese a las llamadas de atención de
la autoridad laboral a la concesionaria, "nada ha cambiado", según la
delegada sindical.
El
personal realiza turnos "de hasta 18,5 horas seguidas", con
incumplimietno del descanso mínimo, "sin tiempo de ir al aseo" y toda
una serie de irregularidades y vulneración de derechos laborales que se llevan
denunciando desde hace años.
La
seguridad privada del Aeropuerto Federico García Lorca Granada-Jaén está
adjudicada desde principios de 2017 a Prosegur, tras finalizar la concesión a
la anterior empresa, Ilunión. La plantilla se subrogó de una compañía a otra,
pero las condiciones laborales no han mejorado, sino todo lo contrario, dicen
los trabajadores, que critican también la actitud de Aena, por no actuar ante
los incumplimientos laborales de la concesionaria.
Pese al
incremento de tráfico en el aeropuerto, que lleva varios años en ascenso, con
un aumento del 20% en 2017, la plantilla no ha variado en los últimos años, y
tiene que controlar muchos más pasajeros en los filtros de acceso, con el
añadido del incremento del riesgo en los aeropuertos por los últimos atentados,
lo que ha elevado enormemente la carga de trabajo, tanto física como psíquica
del personal de vigilancia, sin que se hayan adoptado medidas.
El
aeropuerto granadino ha vivido en los útimos meses varias situaciones de caos y
descontrol en la terminal por la acumuación de circunstancias como demoras,
suspensiones y cancelaciones de vuelos, agravadas por la limitación de horarios
de la terminal, que han llevado "al límite" al personal de vigilancia
por al escasez de efectivos en los puntos de control de pasajeros, unas
carencias que sufre también el resto de vigilancia del aeródromo.