La
Policía investiga a funcionarios de la Comunidad de Madrid por acoso a
vigilantes
Varios trabajadores denuncian
que altos cargos adscritos a Presidencia dan órdenes que no les corresponden,
presionan y hasta se hacen dar masajes
Fuente: elindependiente.com/ Pablo
García/ 25-3-2019
La
Policía está investigando la actitud de varios funcionarios de la Comunidad de
Madrid con la empresa de seguridad adscrita a la dirección de Presidencia, que
depende directamente del presidente regional Ángel Garrido. En concreto, la
Unidad Central de Seguridad Ciudadana, dependiente del Cuerpo Nacional de
Policía, indaga casos de acoso y negligencia entre estos cargos y la empresa
Sasegur, perteneciente al Grupo Control. Sasegur es la firma contratada desde
hace al menos cinco años para labores de vigilancia en la sede de Presidencia,
situada en la Puerta del Sol.
Según
la documentación obtenida por este medio, dicha unidad lleva desde finales de
2018 interrogando a testigos e investigando el papel de estos funcionarios.
Tres de ellos son el técnico especialista y responsable de Seguridad de la
Comunidad Pablo Aledo el técnico de Seguridad Pedro Meroño y el supervisor
Carlos Correcher. Hay testimonios asegurando que estos cargos autonómicos
violan la Ley de Seguridad Privada y se personan en lugares que no deben y dar
órdenes que no les corresponde; grabaciones acosando y amenazando con despedir
a vigilantes; fotos en las que se ve a empleados de seguridad privada dándoles
masajes en horarios de trabajo, y otras actuaciones de carácter negligente.
Una
delegada sindical y jefa de equipo fue presionada por su actividad en el comité
En las
grabaciones -este medio posee varias- se escucha a alguno de los tres
funcionarios extralimitándose con los empleados: en Presidencia de la Comunidad
trabajan como vigilantes aproximadamente medio centenar. En uno de los audios
que ha obtenido este medio, una delegada sindical y a la vez jefe de equipo es
presionada por su actividad en el comité de empresa. En otros audios se amenaza
a otros compañeros con represalias como el despido. También hay fotos de
vigilantes dando masajes a los altos cargos regionales.
En los
testimonios recabados por la Brigada Central de Inspección e Investigación de
la Unidad Central de Seguridad los testigos afirman que “las órdenes de puesto
las transmiten estos señores a los propios vigilantes de seguridad, a los que
en ocasiones directamente les recriminan su forma y manera de realizar su
trabajo”. Según la Ley de Seguridad Privada, está prohibido que los vigilantes
reciban órdenes de funcionarios. “Los técnicos de Seguridad de la Comunidad de
Madrid antes citados le tienen prohibido a R.R. [encargado de Organización,
Dirección e Inspección de Sasegur] el acceso a las instalaciones, facilitándole
solamente el acceso hasta el cuarto de cámaras”.
Las
órdenes las transmiten estos señores a los propios vigilantes de seguridad”
Otra
acta de declaración policial recoge que “estos señores hacen un control férreo
y severo sobre la mayoría de los vigilantes, sobre todo los que no son de su
confianza”. “Por parte de técnicos de la Comunidad de Madrid” el testigo
“quiere hacer constar que reciben órdenes para realizar funciones que cree que
no corresponden al servicio de seguridad, tales como recepción y custodia de
paquetes para altos cargos, haciéndoles responsables de la custodia de dichos
envíos”.
Imagen de vigilante dando un masaje
Otro
lío en el ayuntamiento
Alguno
de los funcionarios investigado ha protagonizado antaño otras polémicas.
Correcher fue señalado como conseguidor en un escándalo ocurrido en junio de
2016 en una empresa dependiente del Ayuntamiento de Madrid: el Grupo Ilunión
(antigua ONCE) perdió un contrato de seguridad valorado en cinco millones de
euros en la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) del ayuntamiento
por no presentar la documentación tras ganar el concurso, tal y como publicó El
Independiente en septiembre pasado. Las fuentes consultadas en ese momento
apuntaron a Correcher como la persona que estaría detrás de la jugada. La
adjudicación final se la llevó Castellana de Seguridad (Casesa).
Correcher,
uno de los investigados, fue condenado en 2005 por acoso laboral
No es
la primera vez que el nombre de Correcher aparece en alguna trama. Surgió en el
escándalo de los espías de la Comunidad de Madrid, que actualmente está siendo
juzgado. Y en 2005 fue condenado por acosar laboralmente a otro vigilante, al
que insultaba sistemáticamente. La Comunidad de Madrid tuvo que abonar al
denunciante 40.000 euros en concepto de indemnización y a distribuir una nota
de disculpa entre los compañeros de la víctima.
Este
medio se ha puesto en contacto con el gabinete de Presidencia de la Comunidad
de Madrid el viernes para poder hablar con alguno de los investigados. Ninguno
ha querido hacer declaraciones.