Destinará 55 millones más a
contratar nuevos vigilantes. Habrá sanciones más duras para las empresas que no
cumplan
La huelga en los arcos de
seguridad colapsó el pasado verano el aeropuerto barcelonés de El Prat
La huelga en los arcos de
seguridad colapsó el pasado verano el aeropuerto barcelonés de El Prat
Fuente: larazon.es/Roberto L. Vargas/18-3-2018
Controles
de seguridad bloqueados, terminales atestadas de viajeros, vuelos perdidos...
la huelga de los vigilantes de los arcos de seguridad de la empresa Eulen en el
aeropuerto de El Prat dejó el pasado verano imágenes que la dirección de AENA
no quiere que se repitan. Para evitarlo, el gestor aeroportuario ha
incrementado un 26% el presupuesto destinado a los servicios de seguridad,
hasta los 370,3 millones de euros. De ese aumento, un 15%, 55 millones de
euros, se destinará a la contratación de nuevo personal, según han confirmado
fuentes de la compañía a LA RAZÓN.
El
servicio se sacó a concurso el pasado mes de diciembre. La licitación se ha
hecho en dos expedientes de contratación debido a su tamaño. Uno recoge los 27
aeropuertos con mayor tráfico. Está dotado con 359 millones de euros y tendrá
diversos adjudicatarios al estar dividido en lotes. En el aeropuerto de
Madrid-Barajas habrá cuatro paquetes para cuatro adjudicatarias, que pujarán
por la seguridad de la inspección de los pasajeros; la de equipajes, bodega y
ronda; la de «fast track» –embarque prioritario independiente– y la del centro
de gestión aeroportuaria. En el de Barcelona-El Prat habrá tres lotes, los
mismos que en Barajas pero excluido el de «fast track». El resto de los
aeropuertos con más de 400.000 pasajeros, a excepción de Palma de Mallorca,
están agrupados en lotes en función de su localización. Por ejemplo, Ibiza y
Menorca van en uno y Sevilla y Jerez en otro. El otro expediente es para los
otros veinte aeródromos con un tráfico menor a 400.000 pasajeros y que tendrá
un solo adjudicatario. El servicio está pendiente de licitarse en el aeropuerto
internacional de Murcia, cuyo contrato de gestión firmó AENA hace semanas.
El
plazo de adjudicación de los servicios será de dos años, prorrogables
anualmente durante otros dos más previo acuerdo entre las partes. Al haberse
puesto en marcha en diciembre, el concurso estará resuelto antes de verano, lo
que pemitirá a AENA llegar a la temporada alta con el asunto de la seguridad
resuelto.
Dado
que gran número de los contratos permanecen en vigor, el objetivo de AENA en la
licitación es recoger las especificaciones del acuerdo alcanzado por los
ministerios de Fomento, Empleo e Interior con sindicatos y empresarios sobre la
contratación de los servicios de seguridad privada el pasado mes de noviembre.
Después del caos de El Prat, y ante la amenaza de su extensión a otros
aeropuertos, el Ministerio de Fomento impulsó en septiembre, a propuesta de los
sindicatos, un grupo de trabajo para fijar las nuevas condiciones en la
contratación de los servicios de seguridad del gestor aeroportuario. El 21 de
noviembre se firmó el pacto. El acuerdo incluye un anexo que fija nuevos pluses
para determinadas actividades. Los vigilantes de los aeropuertos recibirán un
complemento genérico de 0,68 euros por hora efectiva trabajada.
Los
destinados en los arcos de seguridad, donde se originó el conflicto de El Prat,
tendrán un suplemento de 1,19 euros la hora. Y los que se ocupen de los filtros
de rotación –las filas de pasajeros–, otros 0,6 euros. Para este último
colectivo, el acuerdo también recoge una cantidad extra variable vinculada a
cada pliego que no forma parte del convenio colectivo. El pacto incluye que
cada uno de estos importes se incrementarán en un 2% anual, tal y como figura
en el convenio estatal de seguridad privada que se pactó hace unos meses.
Para
garantizar que el servicio se presta de forma correcta, los nuevos pliegos de
contratación no se limitan a mejorar las condiciones laborales de los
vigilantes y a aumentar su cantidad. Los pliegos de prescripciones técnicas se
centran en incrementar la calidad del servicio y mejorar la atención a los
pasajeros y su percepción de la misma. Uno de los aspectos clave de este
apartado será el sancionador. AENA va a endurecer las penalizaciones que
soportarán las compañías de seguridad en caso de que no presten los servicios
según los estándares fijados. El gestor considera que un incremento
presupuestario de un 26% es «más que generoso» como para exigir a cambio un
buen servicio.