viernes, 12 de julio de 2013

Vigilante Despedido por Guarro

Despedido por tirarse pedos en el trabajo

Un vigilante de seguridad del hospital Son Espases de Mallorca eructaba y se cortaba las uñas encima de la mesa de trabajo reiteradamente

Fuente: lavanguardia.es - | 11/07/2013 Javier Silvestre

Jose C., de 43 años y vecino de Mallorca, se quedó estupefacto cuando el pasado 14 de junio le citaron en la sede de recursos humanos de la empresa para la que trabajaba y le comunicaron que estaba despedido. El motivo, tal y como se puede leer en la carta que le entregaron, "por flatulencias, eructos y cortarse las uñas en la mesa y dejar los restos en el teclado".

Desde hacía casi un año que Jose trabajaba como parte del equipo de seguridad del aparcamiento del hospital Son Espases de Palma de Mallorca y él asegura "no haber tenido nunca ningún problema con nadie", aunque admite que "alguna vez hacíamos bromas con otros compañeros".

En declaraciones a Ultima Hora, el despedido confiesa que "es cierto que hacíamos ventosidades y eructábamos, pero nadie nos veía, porque lo hacíamos cuando estábamos solos, así que no entiendo los motivos del despido".

¿Sacarse mocos o alergia?

Las primeras quejas sobre el comportamiento poco educado de Jose llegaron hace unos meses cuando sus jefes le comunicaron que había quejas por su falta de higiene: "Me dijeron que estaba todo el rato sacándome mocos de la nariz y les dije que tenía una alergia y que por ese motivo estaba constantemente sonándome".
Sin embargo, el vigilante de seguridad cree que los motivos de su despido son otros: "Una vez le paré los pies a un tipo en la barrera del aparcamiento que resultó ser familiar de una de mis jefas y ahí empezaron mis problemas", explica.

En la carta de despido se puede leer textualmente que "el pasado 16 de mayo, durante la prestación de su servicio como auxiliar en el parking de Son Espases, hizo gala de flatulencias y eructos delante de compañeros, así como que se cortó las uñas en la mesa y dejó restos en el teclado del ordenador".

José sólo admite esta última parte, ya que "lo de las ventosidades no fue en público, y lo de las uñas puede ser cierto, pero es algo que se hace muy habitualmente. Yo creo que no es motivo de despido".

La Vanguardia ha tratado de ponerse en contacto con el protagonista de esta historia quien ha declinado hacer nuevas declaraciones al respecto.